¿Dónde? Tacos los Gueros. CDMX, México
Dirección: Cucurpe 1702, col. El Parque.
Sabor:
Originalidad:
Lugar:
Precio:
Sobre el lugar: En la avenida Lorenzo Boturini, donde predominan los locales de comida y especialmente, de tacos, destaca la taquería Los Güeros, que a lo largo de 44 años ha sido reconocida como una de las mejores de la Ciudad de México. Nosotros la conocimos recientemente, y la verdad, no nos decepcionó.
Llegamos a cenar en sábado, alrededor de las 8 de la noche, y encontramos filas para entrar, a pesar de que el lugar es bastante grande, abarca dos locales de dos pisos. Pese a las filas, no tardamos más de 10 minutos en entrar porque el servicio es ágil y la gente va saliendo rápido. Como la mayoría de las taquerías tradicionales, no se presta mucho a la sobremesa y ahí vas a lo que vas. Ahora que si de plano vas con mucha hambre o mucha prisa, también tienen un área donde atienden al momento pero en la banqueta, hay menos variedad que si comes en mesa pero la ventaja es que te dan tus tacos y comes al momento, parado.
La carta la verdad no es muy variada y no sorprende: encuentras pastor, bisteck, así como tacos de suadero, cachete, cabeza, tripa, sesos, etc. También ofrecen tortas de pastor, quesos fundidos, gringas, costras y alambre. En cuanto a bebidas, tienen refrescos, aguas frescas y cervezas.
Pero aquí lo más destacable, y una de las razones por las cuales Los Güeros es considerada una de las mejores taquerías de la ciudad, es el sabor de su carne al pastor, que tiene un buen balance entre la sazón del pastor, y el sabor de la carne. No se siente excesivamente condimentada ni cae pesada, y la pueden pedir "planchadita" para que les lleguen los trocitos de carne perfectamente tostados, si es que así les gusta.
Probamos también el queso fundido, muy rico y en pequeña porción, buena para acompañar cualquier taco porque #gordo. No tienen gran variedad de salsas pero las pocas que hay están bien hechas y volvemos a lo mismo, se nota la buena sazón. Nuestra única queja es que lo le echan piña a los tacos al pastos. No sabemos si justo ese día se les había terminado, o no la acostumbran, pero la verdad sí se extraña. Fuera de eso, definitivamente, vale la pena echarse el viaje a la zona de Lorenzo Boturini para probar las delicias de Los Güeros.
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